Proceso de fundición inyectada
Fundición a alta presión
En el proceso de fundición a alta presión, se emplea una presión elevada para llenar rápidamente el molde y crear detalles finos. La alta presión da como resultado un acabado superficial más preciso. Este método es adecuado para producir piezas intrincadas y complejas con paredes finas. Por consiguiente, es muy adecuado para fabricar componentes y piezas utilizados en diversas industrias, como la automovilística, la aeroespacial y la electrónica. La fundición a alta presión es especialmente eficaz para la producción de piezas de tamaño pequeño y mediano.
Fundición a baja presión
En la fundición a baja presión, el metal fundido se introduce en el molde mediante un proceso controlado con baja presión. Este método es especialmente adecuado para piezas de gran volumen, como las llantas de ruedas. Las piezas fundidas producidas presentan una buena estanqueidad y una excelente calidad superficial, ya que se minimiza la oxidación en el molde. En comparación con la fundición a alta presión, la fundición a baja presión tiende a ser más lenta debido a las menores presiones de inyección. El uso de nuestro Thermodur 2383 Supercool es óptimo por su conductividad térmica extremadamente alta, lo que permite igualar rápidamente la temperatura y reducir los tiempos de ciclo de los procesos de fundición.